Respuestas de foro creadas
-
AutorRespuestas
-
en respuesta a: El Clan Ashkar #344304
Los mediohermanos que forman el clan Ashkar se dirigen a Alandaen para cumplir el encargo propuesto por la arpía. Rogruk ha quedado un rato antes en la taberna con Allen, el pescador, y ambos esperan allí a que Zakamwel, tras acabar sus quehaceres, se una a la reunión.
Taberna Mar Revuelta
Se trata de una taberna pequeña pero de aspecto acogedor. Pequeñas mesas de madera con cuatro sillas están colocadas a intervalos regulares de manera muy junta. Hay varios
pescadores tomándose unos tragos y comiendo algo después de la dura jornada que han tenido que pasar en el mar. Algunos borrachos están durmiendo la mona encima de las mesas. Un
fuego de leña hace que el ambiente sea agradable.Puedes ver una salida: -norte-.
Exclamas con una voz sobrenatural: ¡Buenas tardes!
Zakamwel se acerca a su semihermano.
Globsglobis el tunante susurra: Tengo que conseguir un poco de vómito de gato enfermo para echarlo en las botas de ese Nivrim.
Rogruk bebe cerveza con un viejo pescador y escucha de casualidad al tunante.
Rogruk pregunta: ¡Eh! ¡Tunante! ¿De qué Nivrim hablas?
Zakamwel se acerca más a su hermano y le da una gran palmada en la espalda.
Dices con una voz sobrenatural: Que no te enteras.
La Capa Sangrienta de Nerbrad de Rogruk derrama sangre sobre el suelo.
Suspiras.
Dices con una voz sobrenatural: Maldita capa.
Exclamas con una voz sobrenatural: ¡¡Hermano!!
Rogruk saluda efusivamente a su hermano.
Exclamas con una voz sobrenatural: ¡Que no te enteras!
Rogruk se rie.
Saludas a Rogruk alegremente.
Rogruk dice: Perdona, estaba vigilando a ése. Como de costumbre.
Rogruk señala con el dedo a Globsglobis el tunante.
Rogruk dice: Permíteme presentarte a Allen, el Pescador. Nuestro cliente.
Zakamwel se gira hacia el pescador.
Dices con una voz sobrenatural: Encantado, Allen.
Zakamwel saluda con un gesto amable de la mano
Allen dice: El placer es mío. Mi nombre es Allen, y creo que sois los únicos que habéis creído en mí.
Sonríes.
Dices con una voz sobrenatural: Aquí donde nos ves con estas pintas, somos buena gente.
Allen dice: Eso espero. La bruja de la arpía me ha desplumado, y desde mi bote no puedo llegar al banco de peces.
Zakamwel hace un gesto con la mano como quitándole importancia al asunto.
Señalas con el dedo a Rogruk.
Dices con una voz sobrenatural: Mi hermano Rogruk es un gran marinero, no te preocupes, todo va a salir bien.
Allen se emociona al hablar: ¡Es posible que sea un descubrimiento que devuelva a Alandaen la prosperidad de antaño!
Allen dice: Aunque espero no tener que pagar sus mismas consecuencias, claro está.
Zakamwel se agacha un poco hacia adelante para escuchar con más interés la historia del pescador.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Consecuencias?
Rogruk ¿No conoces la historia de la Pesca Milagrosa?
Rogruk piensa con cuidado para no hacerse daño.
Zakamwel se gira hacia Rogruk, sorprendido.
Lo niegas todo, todo, todo.
Rogruk se encoge de hombros.
Rogruk dice: Yo tampoco.
Allen dice: Todo ocurrió hace muchos años. Yo apenas era un crío.
Zakamwel vuelve a prestar atención plena al pescador.
Allen señala el cuadro presente en la taberna.
Zakamwel sigue con la mirada el punto señalado.
Allen dice: El cuadro lleva por título «La Pesca Milagrosa» y se ve un barco pesquero enfrentándose a la pesca con arpones de una gran ballena. Eso trajo la ruina aquí.
Allen señala también diferentes objetos que decoran las paredes de la taberna. Una pequeña ancla oxidada, retirada del servicio activo hace ya muchos años. Posiblemente de un bote pesquero.
Allen señala ahora pesadas redes de pesca deterioradas por el paso de los años. Un viejo catalejo oxidado, descolorido por el paso del tiempo. El crepitar del fuego es lo único que se escucha en la pequeña sala, a excepción de algunos comentarios oportunos. Los pescadores que acaban de llegar de faenar parecen comer y beber en riguroso silencio.
Allen dice: «La Pesca Milagrosa» fue un evento ocurrido hace muchos años y que enriqueció a los pescadores de Alandaen. Los balleneros, dirigidos por Obado Entibo, pescaron una enorme ballena gigante en las costas de Alandaen, enriqueciéndose gracias a ello. Obado Entibo siempre alegó ser guiado por la propia diosa Nirvë.
Asientes con la cabeza.
Allen dice: A mí no hay Nirvë que me guíe, pero el banco de peces existe.
Dices con una voz sobrenatural: Nosotros tampoco creemos en dioses, así que ya tenemos algo en común.
Sonríes.
Allen dice: Sin embargo la pesca afectó a los marineros. Son callados y comen y beben en un estricto silencio, mientras te lanzan miradas desafiantes sin parpadear siquiera. Van vestidos de la cabeza a los pies con enormes abrigos amarillos y gorros de lana marineros, dejando poco que ver de sus rostros.
Rogruk asiente a Allen, el Viejo Pescador.
Allen dice: Sólo espero que mi tripulación no se vea tan lúgubre como la que tripuló aquella vez el ballenero.
Zakamwel coge del hombro al pescador.
Dices con una voz sobrenatural: Amigo mío, somos los Ashkar, segúramente no has oído todavía hablar de nosotros, pero sin duda en un futuro se hablará. Mi hermano, aquí presente, como te decía antes, es un gran marinero, no tienes nada que temer.
Allen dice: Si estáis dispuestos a ello, deberíamos zarpar de inmediato. Sería muy lucrativo para ambas partes.
Rogruk te mira.
Rogruk dice: Tú mandas, hermano. Este viejo pescador no tiene mucho con lo que pagarnos…
Zakamwel hace un gesto de nuevo con la mano.
Dices con una voz sobrenatural: Bueno, bueno, pecata minuta, ya hablaremos del pago concluído el encargo.
Allen dice: ¡Espera! ¡Pero es un banco de peces cuya localización conoceríais! ¡Esa información bien vale un pago!
Dices con una voz sobrenatural: Vamos yendo al muelle, que se nos hace de noche.
Rogruk dice: Mejor zarpar de día, que de noche las mareas son peligrosas, sí.
Zakamwel y Rogruk hacen caso omiso de la petición del pescador de un pago a cambio de la localización, y salen de la taberna hacia el muelle.
Muelle de Alandaen
Te encuentras en uno de los muchos muelles que hay en el puerto de Alandaen. Todos ellos son privados, pertenecientes a grandes magnates que vienen a anduar de vacaciones; éste, al
contrario, es público: de ahí que haya tanto barco en mal estado.Rogruk realiza un gesto a uno de los miembros de las Autoridades Portuarias y acto seguido sueltan las amarras de su embarcación, quedando lista para surcar los mares de Eirea.
Rogruk (Sem) se embarca en el Jahkemate I de los Ashkar (Lundar).
Dices con una voz sobrenatural: Ahora sube con nosotros, y te voy a enseñar nuestro barco.
Cruzas la pasarela de acceso al Jahkemate I de los Ashkar (Lundar) y llegas a su cubierta.
Instantes después, el pescador también sube, con una experiencia y una confianza evidentes, a la cubierta del barco.
Rogruk dice: Bien, Allen, dinos dónde está.
Dices con una voz sobrenatural: Un momento hermano.
Dices con una voz sobrenatural: Le he prometido enseñarle el barco.
Zakamwel y Allen dan una larga vuelta por el barco mientras Rogruk prepara todo para zarpar hacia las coordenadas que el pescador indique. EL semi-elfo se esmera en los detalles de las explicaciones para que el pescador se sienta cómodo. Al cabo de un rato, ambos vuelven a la proa.
Dices con una voz sobrenatural: Ya estamos.
Allen se aferra a la balconada del lundar y otea el horizonte.
Dices con una voz sobrenatural: Ahora sí, amigo mío.
Dices con una voz sobrenatural: Ha llegado la hora de que nos des las indicaciones para llegar, si no no podemos llevarte.
Allen susurra a Rogruk unas coordenadas secretas.
Rogruk exclama: ¡A toda vela! ¡Rumbo a 25º Oeste 30º Sur!
Allen mira a Rogruk con mala cara y se da un manotazo de desesperación en la frente. El barco se pone en marcha hacia el punto indicado, y por el camino, un barco pirata divisa el barco de los Ashkar, y se aproxima con la intención de hundirlo.
Al acercarse navegando ambos barcos, una bala del barco pirata alcanza el barco del clan.
Rogruk envaina su Catalejo de Berilio.
Rogruk toma la determinación de abordar el barco pirata y acabar con sus vidas antes de que consigan hundir el barco del clan. Mientras tanto, una segunda bala alcanza la cubierta del barco de Ashkar. El pescador empieza a ponerse nervioso.
Dices con una voz sobrenatural: Piratas, no te preocupes Allen, esto lo resuelve mi hermano.
Rogruk empuña el Arpeo de Abordaje.
Rogruk agarra el cuerpo enrollado de su arpeo con una mano y con la otra empieza a hacer oscilar el garfio del mismo, que va cogiendo inercia poco a poco.
Con gran atino, Rogruk lanza su arpeo y lo engancha en los palos del mástil del barco de la Tríada (Barco). Acto seguido, tensa la cuerda para asegurarlo y empieza a buscar espacio para el abordaje.
Acto seguido, Rogruk se lanza a la carrera por la cubierta del navío, tensando la cuerda del arpeo con fuerza, y se prepara para dar el gran salto.
En ese momento, una tercera bala impacta contra el barco de Ashkar. Allen el pescador empieza a temblar de los nervios, Zakamwel continúa impertérrito, confiando en su semihermano menor.
Rogruk exclama: ¡¡¡Al abordaaaajeeeeeeeeeeeeee!!!
¡Rogruk (Sem) salta por la borda y se lanza al abordaje del Barco de la Tríada (Barco), enarbolando su grito de guerra!
Algunas balas procedentes del barco de la tríada siguen haciendo diana contra el pequeño barco de los Ashkar, que continúa aguantando los envites estoicamente, mientras tanto, Rogruk continúa dentro del barco enemigo limpiando la cubierta de piratas. Una vez limpio el barco enemigo, Rogruk regresa con su hermano y el cliente de ambos con una bolsa.
¡Rogruk ancla su arpeo de abordaje en mástil de la embarcación!
¡Ves cómo Rogruk se aproxima corriendo al borde de su embarcación y se prepara para abordaros!
¡Rogruk (Sem) llega volando por los aires colgando de su arpeo y aborda la embarcación!
Dices con una voz sobrenatural: Te lo dije, Allen, ningún problema.
Rogruk se tranquiliza después de sus combates en el otro barco y vuelve a establecer la ruta prevista antes del ataque. El barco continúa surcando los mares hasta que en un momento dado:
Allen dice: Es aquí. Lanzad las redes al mar y lo comprobaréis.
Zakamwel se asoma por la barandilla de la cubierta.
Dices con una voz sobrenatural: Uf, casi que voy a inspeccionar el contenido de esta bolsa que traes en el camarote mientras vosotros pescais.
Dices con una voz sobrenatural: Ya sabes hermano que no soy un elfo de mar.
Zakamwel se retira al camarote para inspeccionar el contenido de la bolsa que su mediohermano ha traído del otro barco, mientras Allen y Rogruk se dedican a sacar el máximo partido al banco de peces.
Después de haber inspeccionado el contenido de la bolsa, y de haber descansado un rato en la cama del camarote, Zakamwel vuelve a salir a ver cómo va esa pareja con las redes.
Dices con una voz sobrenatural: En la bolsa había bastante comida.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Cómo está yendo la pesca?
Rogruk y Allen están celebrando la pesca de varios especímenes grandes de Salmones, principalmente.
Rogruk dice: Esto es una mina de oro, Zak.
Zakamwel mira a su hermano emocionado.
Zakamwel mira a Allen con atención.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Misión cumplida, amigo Allen?
Rogruk pregunta: ¿Deberíamos regresar?
Allen suspira emocionado.
Allen dice: Sí, creo que sí.
Dices con una voz sobrenatural: Bien, volvamos entonces a puerto y allí hablamos de precios.
Rogruk exclama: ¡Vamos a por todas, así da gusto surcar las olas! ¡A toda vela, muchachos! ¡Rumbo a 36º Oeste 22º Sur!
Después de un rato navegando a un ritmo más calmado, pues se nota el cansancio por el viaje, nuestros aventureros llegan a puerto con el pescador.
Rogruk (Sem) salta por la borda de la embarcación hasta llegar a la superficie.
Coges carrerilla hasta saltar por la borda del Jahkemate I de los Ashkar (Lundar) y caer en la superficie.
El pescador, una vez más demostrando mucha más experiencia que la pareja de mediohermanos, desciende también del barco.
Rogruk agarra con fuerza un cabo libre del muelle y amarra el Jahkemate I de los Ashkar (Lundar) bajo la atenta mirada de las Autoridades Portuarias de Eirea.
Dices con una voz sobrenatural: Qué ganas tenía de pisar tierra firme, qué mal me manejo en el mar.
Rogruk dice: Volvamos a la taberna de la Mar Revuelta a concluir nuestros negocios.
Zakamwel mira a Allen con una sonrisa.
Dices con una voz sobrenatural: Esa es una buena idea.
Tras un paseo por Alandaen, con la calma, el trío llega de nuevo a la taberna, donde negociarán el precio final del encargo.
Rogruk bebe triunfalmente una jarra después de la dura jornada.
Rogruk dice: Mañana repararemos el lundar. No es nuestro primer encontronazo con piratas.
Zakamwel grita al camarero con educación: Por favor, una cerveza cuando puedas.
Allen asiente con la cabeza.
Dices con una voz sobrenatural: Ha llegado la hora, toca hablar de dinero.
Rogruk y Allen beben de sus jarras. La habilidad para beber de Allen es bastante superior a la del semiorco.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Cuánto puedes ofrecernos por el servicio de transporte, amigo?
Zakamwel apura torpemente media cerveza.
Allen dice: ¿Qué más queréis? ¡No tengo nada! Cuando venda mañana en puerto la gente empezará a creerme.
Allen dice: Entonces podré alquilar un barco y contratar mi propia tripulación.
Dices con una voz sobrenatural: Vamos a hacer una cosa.
Zakamwel mira con comprensión al pescador.
Dices con una voz sobrenatural: Entiendo que la arpía te desplumó hace unos días.
Dices con una voz sobrenatural: Y que ahora no tienes dinero para pagarnos.
Zakamwel coge varias servilletas de la barra del bar.
Dices con una voz sobrenatural: Sin embargo, sí hay una cosa que puedes hacer por nosotros.
Allen dice: Pagaré si queréis la reparación de vuestro lundar. Y con eso quedará saldada mi deuda.
Zakamwel Permíteme, creo que mi solución te va a gustar más incluso.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Ves estas servilletas?
Allen escucha con atención.
Dices con una voz sobrenatural: En cada una de ellas, mientras navegues, vas a poner el nombre de Ashkar, con el servicio prestado y hablando bien de nosotros, y las vas a ir dejando en cada uno de los puertos que pises, para que todo el mundo nos conozca.
Preguntas con una voz sobrenatural: ¿Aceptas el trato?
Allen mira con incredulidad a Zakamwel. ¿Servilletas?
Allen dubita un segundo.
Dices con una voz sobrenatural: Servilletas.
Dices con una voz sobrenatural: Es lo que tengo más a mano, si prefieres hacerlo en buena calidad, con pergaminos, siéntete libre.
Rogruk se rie.
Allen dice: Acepto el trato. Desde luego sois baratos.
Dices con una voz sobrenatural: Las servilletas son una forma de hablar.
Allen dice: Servilletas.
Allen se ríe.
Dices con una voz sobrenatural: Lo que pretendo es que hables bien a todo el que te cruces sobre el clan Ashkar, esa publicidad inicial puede darnos más que los cien platinos que necesitamos para arreglar el barco.
Allen estrecha las manos de Rogruk y Zakamwel.
Dices con una voz sobrenatural: Hasta la próxima, amigo Allen.
Allen dice: Así lo haré, y ahora si me disculpáis…
Allen dice: Tengo servilletas que decorar.
Te ríes.
Rogruk se rie.
Zakamwel choca la mano con ALlen.
-
AutorRespuestas