Szhysszh

Ayudaría muchísimo Vhurkul.

¿Serviría poner que si estás multado o perseguido no te deje hacerla? Lo comento porque la quest realmente se puso con otro propósito (gente relativamente nueva que mata PNJs por error). Alternativamente se podría limitar la quest por nivel quizá.

No creo que sirviera, pues solo tendría que pagar la multa y hacer luego la quest. Creo que lo ideal sería, ha ser posible que no lo se, que solo pudiera hacerla gente la cual no haya sido amonestada con bajada de estatus por la guardia, ya sea bajada o enemigo, básicamente que si el general te hace enemigo no puedas hacerla, así serviría para su propósito que fue poder recuperar estatus accidentales.

Los otros puntos estaría muy agradecido de que algún inmortal con tiempo y ganas le pusiera algo de ganas. Pues la situación es muy mala actualmente, no tengo manera de saber que cantidad de multa tiene, ahora mismo lo estoy gestionando usando un excel(Cosa que me dificulta mucho la jugabilidad). Cada multa que pongo me arriesgo a que este mal aplicada por desconocimiento de información y jugarme un baneo, que os voy a contar, si ya sabéis que cada mes tenéis que venir 3 o 4 veces a hablar conmigo para que os explique las multas.  En resumen, actualizar un poco los comandos de la guardia sería una gran ayuda para aquellos que disfrutamos del gremio.

 

[Rol] Tras un largo camino por el rocoso sendero, aprovechando la oscuridad de la noche para no ser vistos por enemigos indeseables, Tkugd, a lomos de su fiel Entrecot, y Gruzzt, cargando en uno de sus hombros al gnoll que acababan de capturar, llegan a la fortaleza negra donde los tambores retumban para recibir al mejor cocinero que han tenido en décadas. [Tkugd]

[Rol] Tkugd acaricia el peludo lomo de su gran jabalí.

[Rol] Gruzzt entra por la puerta Negra con el cuerpo cargando como si de un saco se tratase mientras grita: GRUZZT!!!

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Ya llegamos Entgrecot, ahogra podgras revolcagrte en el bagrro.

[Rol] Entrecot arrúa de felicidad. [Tkugd]

[Rol] Lhurshak comienza a moverse levemente, parece que el efecto del aturdimiento de la pedrada comienza a desaparecer.

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Ggruzzt, ten cuidado el gnoll pagrece que se mueve… hay que llevaglo al Caudillo pagra que él decida.

[Rol] Gruzzt mira de reojo al jabalí con ojos voraces
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[Rol] Escupe a Gruzzt. [Tkugd]

[Rol] Tkugd escupe a Gruzzt.

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Entgrecot no es ninguna comida tuya!

[Rol] Gruzzt asiente con la cabeza mientras se rasca la entrepierna con la mano libre

[Rol] Entrecot mueve su colita de felicidad. [Tkugd]

[Rol] El enorme Troll atraviesa una enorme puerta situada en las entrañas de la fortaleza. Se trata de la Sala de Torturas donde se encuentra el Caudillo del Ejército Negro. Una sala que desprende un hedor a sangre insoportable, las paredes repletas de manchas y trozos de vísceras decoran la estancia con un toque macabro. Al final de la habitación, escondidos por la oscuridad, logras vislumbrar una silla con un individuo sentado en ella, y una gran figura de pie junto a él.

[Rol] Lhurshak abre los ojos lentamente.

[Rol] Lhurshak gruñe: dond… donde estoy….

[Rol] Lhurshak sacude la cabeza de un lado a otro para despejarse.

[Rol] La figura esbelta del Caudillo gira su torso para ver quien era

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra dice: Quien osa molestarme en mis menesteres! Sucias ratas!

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Discúlpenos Caudillo…

[Rol] El caudillo coge unos alicates de la mesa y los frota contra un trapo para limpiarlos

[Rol] Tkugd entra en la habitación con la cabeza gacha evitando mantener contacto visual con el caudillo.

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Fuimos a pogr suministgros pagra el cocinegro…

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Pegro nos encontgramos con este gnoll captugrado.

[Rol] Gruzzt Deja caer el cuerpo del Gnoll unos metros más adelante de su posición
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[Rol] Al darse cuenta de la situación, el joven gnoll se pone de pie, y aunque está encadenado e indefenso y conoce el peligro de la situación, saca pecho demostrando orgullo y dignidad. [Lhurshak]

[Rol] Tkugd señala al gnoll manteniendo las distancias con su señor.

[Rol] El caudillo mira fijamente al Gnoll apresado

[Rol] Gruzzt se rasca la cabeza sin saber muy bien que hacer

[Rol] Lhurshak siente la penetrante mirada del caudillo y, aunque en su interior siente miedo, mantiene sus grandes y ambarinos ojos fijos en el líder de Golthur.

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra dice: Y que se supone que tengo que hacer con este escuálido saco de huesos?

[Rol] El caudillo afila una de sus herramientas con una piedra

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra dice: acaso lo traéis para interrogar?

[Rol] Tkugd el Mellao dice: La vegrdad es que no sabemos quién es, y Tkugd y Ggruzzt no hacen nada sin su apgrbación señogr.

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra dice: así me gusta trasgo! Siempre ha demostrado su inteligencia y me has servido bien, no como esa estúpida criatura que tiene la inteligencia de un mosquito!

[Rol] Gruzzt empieza a saltar de alegría mientras al unísono dice: GRUZZT GRUZZT GRUZZT..

[Rol] Tkugd el Mellao dice: Ggracias mi señogr.

[Rol] Tkugd agacha aún más la cabeza.

[Rol] El Caudillo de la Fortaleza Negra asiente militarmente al trasgo y con una señal de su dedo índice ordena al troll que ponga al prisionero en la silla del fondo.

[Rol] Gruzzt parece haber entendido todo a la primera y asiente sorprendentemente al caudillo.

[Rol] Gruzzt coge por las rodillas al Gnoll sin esfuerzo alguno y lo sienta en la silla

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra se acerca y le coloca los grilletes para que no se mueva.

[Rol] El Caudillo De La Fortaleza Negra dice: bien bien, veamos que nos cuentas y cuáles son tus intenciones!

[Rol] El Caudillo de la fortaleza negra coge unas tenazas de la mesa de tortura y las golpea contra su otra mano mientras sonríe sádicamente.

Los dos súbditos del Caudillo quedan atónitos ante el sadismo de su señor, nunca habían estado en la sala de torturas y esperan no estar nunca más. El gnoll medio aturdido intenta recobrar el sentido para mediar palabra con ellos mientras que el Caudillo está haciendo un repaso de todo el inventario de tortura que tiene sobre la mesa, limpiando las herramientas y afilando otras.

Darin, Rey de Kheleb Dum se retira la capucha y mira a su alrededor, confiando en que nadie lo haya visto entrar en el cuartel.

Cierras la puerta este.

Szhysszh señala a dos guardias para que custodien la entrada

Dices en adurn: Recluta! Trae un par de pintas y algo de comer para el invitado

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Saludos, General, espero que mantenga la discreción que acordamos

Szhysszh se agacha y hace una reverencia profunda

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Pues todas las dificultades que conllevan viajar desde Kheleb-Dum montado en un asno, mis asesores me recomendaron discreción

Szhysszh mira a uno de los guardias fijamente

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No están las cosas en Kheleb como para ir proclamando a los cuatro vientos que voy a reunirme con el General de Anduar.

Dices en adurn: Saludos Rey Darin, espero que haya tenido un viaje sin dificultades y por la discreción no se preocupe.

Preguntas en adurn: Lamentablemente no lo están no, entonces esta al corriente de todo lo ocurrido, mi señor?

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Pues a decir verdad, conozco parte de la historia, digamos que nuestra versión.

Dices en adurn: Le agradezco que aceptase reunirse conmigo para conocer la otra versión

Dices en adurn: No voy a andarme con rodeos pues sé que el viaje de vuelta es largo y cansado

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Mis hermanos me aconsejaron que no viniera, que conocían su cabezonería y sería imposible dialogar con usted.

Szhysszh sonríe ampliamente mientras asiente con la cabeza

Dices en adurn: Orgulloso estoy de mi cabezonería, Rey Darín, es lo que mantiene mi reino a salvo

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Algo tenemos en común, pese a la distancia no somos tan distintos.

Szhysszh asiente fervorosamente

Dices en adurn: Pues con premura, voy a explicarle los hechos si lo cree conveniente

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Le escucho, cuénteme su versión, General.

Suoluk caza al vuelo algunas palabras sueltas.

Dices en adurn: Todo empezó con un acto delictivo más digno de un ladrón que de un sacerdote, Ghyrduana ciudadana de Kheleb Dum y consejero vuestro cometió un delito en nuestro reino Anduar, apropiándose de algo que no le pertenecía

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Así que era cierto…

Suoluk asiente con la cabeza.

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Según había escuchado, juraba por Eralie que se lo había encontrado, que estaba tirado en el suelo.

Dices en adurn: Intente diplomáticamente que lo devolviera, juro por Comellas que lo intente señor, pero el orgullo enano o sus viles intenciones no le hicieron entrar en razón

Dices en adurn: Dicho esto, no me quedo más remedio que aplicar la ley del reino
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Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No lo dudo

Dices en adurn: Recluta Suoluk! Díctale la ley al Rey Darin y el castigo que se le impuso a Ghyrduana

Suoluk dice con voz sobrenatural: con su permiso ilustrísimo Rey darin

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Adelante

Suoluk dice con voz sobrenatural: tras la negativa de devolver el pantalón a su dueño, tras una amable petición, se le impuso una multa de 800 platinos por robo y 900 extra que fue el coste del pantalón, según dictan nuestras leyes, mi señor

Suoluk dice con voz sobrenatural: pero insisto, primero se le pidió que devolviera la prenda hurtada

Suoluk dice con voz sobrenatural: y se intentó abrir una vía diplomática dado su estatus en el reino de kheleb, aliado de Anduar

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No entiendo qué problema tendría en devolver algo que cogió «prestado»

Dices en adurn: Recluta! Vuelva a la guardia

Suoluk da un paso atrás

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Me avergüenza su comportamiento, robando en una ciudad… Un enano robando…

Dices en adurn: No se preocupe señor, en todos lados hay ovejas descarriadas

Dices en adurn: Pero lo peor de todo no fue eso, supongo que bajo palabras biensonantes y más de una cerveza consiguió poner de acuerdo al consejero Durgan

Dices en adurn: y varios ciudadanos como Rhomdur y Dertaine
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Darin, Rey de Kheleb Dum, pregunta: ¿Y puede saberse en qué se pusieron de acuerdo?

Suoluk asiente con tristeza.

Dices en adurn: Su siguiente movimiento fue enviarme una carta, escrita de puño y letra por Ghyrduana, y firmada por el resto de los nombrados anteriormente, donde se me amenazaba personalmente con hacerme exiliado de vuestro reino Kheleb Dum a menos que retirase la multa.

Dices en adurn: Recluta! Da un paso al frente y muéstrale la carta como prueba
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Suoluk obedece a su general y entrega un pergamino desenrollado a Darin.

Suoluk dice con voz sobrenatural: aquí tenemos mi señor.

Darin, Rey de Kheleb Dum lee el pergamino un par de veces para asegurarse y se lo devuelve al recluta.

Suoluk recoge el pergamino con una reverencia y vuelve a su lugar tras el general.

Dices en adurn: Les respondí diplomáticamente para que esto no fuera a más, explicando la situación y que las leyes de cada reino deben ser respetadas y aplicadas
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Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Así que pretendían que retirasen las multas también de Durgan y Rhomdur

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No tenía conocimiento de esas sanciones

Dices en adurn: Exacto

Dices en adurn: Son sanciones muy antiguas mi señor

Dices en adurn: Básicamente, no están multados, querían la remuneración de aquellas que antaño fueron aplicadas

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Antiguas pero, según los implicados, injustas

Dices en adurn: Eso alegan, mi señor

Suoluk pide la palabra.

Darin, Rey de Kheleb Dum, pregunta: Volviendo al tema que nos concierne, ¿cuál fue la respuesta que le dieron los enanos al negarse a retirar las multas?

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Creo que su ayudante quiere decirnos algo

Dices en adurn: Adelante Suoluk

Suoluk dice con voz sobrenatural: con su permiso, perdón por intervenir, solo quería puntualizar que en su día Durgan y Rhomdur no expresaron disconformidad con las multas, ni negaron los hechos. Si entonces hubieran mostrado inconformidad o aportado prueba alguna se hubiera revisado el caso.

Szhysszh asiente fervorosamente

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Entiendo.

Dices en adurn: Gracias por el apunte recluta

Suoluk hace una reverencia solemne.

Suoluk se pone firme, en posición de guardia, mirando de nuevo al frente.

Dices en adurn: Aclarado este punto, la contestación de sus ciudadanos fue excesiva en mi opinión, e imperdonable, la carta escrita de puño y letra por Durgan y firmada por el resto, una sarta de insultos e improperios hacia Anduar y hacia mí, asintiendo que a partir de ahora era un exiliado de Kheleb Dum

Dices en adurn: Recluta, muéstrela!

Darin, Rey de Kheleb Dum, pregunta: ¿Exiliado de Kheleb Dum?

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No puedo creerlo.

Dices en adurn: Así es mi señor

Dices en adurn: Yo tampoco podía creerlo, por eso le cité en esta reunión
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Suoluk muestra la prueba al rey Darin.

Darin, Rey de Kheleb Dum observa meticulosamente el contenido de la carta.

Dices en adurn: Pues creo que se ha actuado a sus espaldas, Rey bajo la montaña. Por intereses propios más que por problemas diplomáticos

Dices en adurn: Nuestras relaciones comerciales siempre fueron ricas y prosperas, como para arriesgarlas por cuatro enanos descarriados

Dices en adurn: Y eso lo respeto, mi señor

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Si no recuerdo mal, se reunieron hace poco en los salones de Kheleb, reconocí a un par de consejeros

Szhysszh se agacha ante Darin y le muestra su respeto

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Pero no tengo la menor idea de qué hablaron, pues no hacían más que cuchichear.

Dices en adurn: Pues este es el entramado que planearon, señor

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Anduar ha sido siempre, y espero que lo siga siendo, un buen aliado de Kheleb

Dices en adurn: Lo será señor, Renalkar Comellas opina igual

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Hemos vendido en esta ciudad cantidades ingentes de minerales y gemas, con los beneficios correspondientes para ambas ciudades

Suoluk asiente con la cabeza vigorosamente.

Dices en adurn: Nos gustaría abusar un poco de su confianza, señor, y solicitar un par de asuntos a ser posible

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Adelante, os escucho, no prometo nada, pero os escucharé

Dices en adurn: Renalkas y el consejo de comerciantes están dispuestos a olvidar todo este asunto por el bien de las relaciones diplomáticas y entendiendo que usted no sabía absolutamente nada de todo este entramado, siempre y cuando se me pueda devolver el estatus en Kheleb Dum de antaño

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: No me parece mal, viendo que los implicados parecen que han mirado más por sus propios intereses que por el del pueblo enano

Suoluk dice con voz sobrenatural: Si me permite, añadir que nuestro general no hizo otra cosa que aplicar nuestra ley, y creemos que no merece ser tratado como un vulgar delincuente, él siempre ha sido justo y eso que su posición, es complicada puesto que Anduar es neutral y con una amplia diversidad racial.

Dices en adurn: Gracias Recluta Suoluk, por último señor, no voy a entrometerme en sus cuestiones internas, pero me permitirá que mantengamos el castigo aplicado a los implicados en el reino de Anduar, pues el insulto y las amenazas recibidas no pueden quedar impunes, espero que lo entienda

Suoluk dice con voz sobrenatural: no obstante si vos, rey darin cree que necesita algún tipo de castigo, yo me ofrezco a sufrirlo en su lugar, conozco a mi general y sé que siempre actua de buena fe y de la forma más justa y mi honor de soldado no me permitiría que sufriera un castigo injusto, prefiero sufrirlo en su lugar

Szhysszh da un golpe con su escudo en el suelo y acoge una posición recta y orgullosa hacia las palabras de su recluta
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Suoluk te hace una reverencia solemne.

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Tengo que meditar ciertas cosas de la reunión, entiendo vuestra postura

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Comprendo vuestra solicitud de readmisión, pero respecto a las sanciones antiguas

Darin, Rey de Kheleb Dum suspira.

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Si fueron motivo de queja de algunos hermanos, tal vez no fueron justas del todo

Dices en adurn: Entiendo que tenga que meditarlo señor, y seremos pacientes en su respuesta, pero entienda que los actos de estos individuos no pueden quedar impunes

Dices en adurn: Tómese el tiempo que necesite, pero el castigo por parte de Anduar es innamovible

Darin, Rey de Kheleb Dum, pregunta: ¿Entonces vuestra postura de mantener las sanciones aplica a los firmantes de la carta en cuestión?

Dices en adurn: Digamos que si quieren la redención, deberían trabajar en ella, si no en que lugar dejaríamos a Anduar, quedaríamos como unos flojos ante otros reinos que harían lo mismo

Dices en adurn: Y la posición neutral de paz que ha mantenido Anduar durante tantos eones, quedaría cuestionada señor

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Entiendo

Suoluk dice con voz sobrenatural: la situación en anduar siempre pende de un hilo, debido a su situación neutral, no podemos ser clementes con las multas a no ser que los hechos sean probados minuciosamente o la situación escaparía a nuestro control

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Lo sé, las sanciones nunca son bien recibidas…

Dices en adurn: De todas formas entiendo su situación, señor, y por ello esperaré su respuesta, solo le pedimos que acepte nuestro castigo hacia ellos, y que se me devuelva el estatus

Dices en adurn: Pues todo esto no debería haber ido tan allá

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Entiendo vuestra reacción, posiblemente yo habría tomado alguna más severa

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Me reuniré con el consejo de Kheleb Dum, y consultaré el tema de su exilio

Dices en adurn: No fue por falta de ganas mi señor, pero el consejo de comerciantes son más calmados que yo

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Ya que estas decisiones administrativas recaen en las manos del Consejo

Dices en adurn: Por supuesto señor, si usted mientras medita la situación en su trono de piedra, se le ocurre alguna solución alternativa, estamos dispuestos a escucharla

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Lo que menos deseo es que los cimientos sobre los que se asientan nuestras relaciones se tambaleen

Dices en adurn: Lo mismo opinamos nosotros, señor

Suoluk asiente con la cabeza vigorosamente.

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: En cuanto me reúna con el consejo y tomemos alguna decisión, se la haré llegar

Dices en adurn: Y como acto para el buen funcionamiento de estas, está tanto usted como su guardia, invitados a quedarse en nuestro reino todo el tiempo que requiera

Dices en adurn: Todo lo que necesite se le ofrecerá gratuitamente

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Prefiero volver a la montaña, no quiero que mi ausencia genere sospechas de nuestra reunión, últimamente el ambiente en la montaña está enrarecido

Suoluk se cuadra en señal de respeto ante Darin y su general.

Dices en adurn: Entiendo, entonces permítame que le ofrezca comida y bebida para el viaje señor

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Eso no te lo voy a negar, gracias

Dices en adurn: Recluta Suoluk! Dígale a cocina que llenen un par de petates con comida y unos cuantos odres de cerveza

Suoluk dice con voz sobrenatural: con permiso, señores

Suoluk hace una reverencia solemne.

Dices en adurn: El viaje es largo y esto lo hará más liviano

Dices en adurn: Solo me queda agradecerle su presencia Rey Darin, y que siempre estaremos en deuda con usted por esto

Suoluk abandona la sala y se dirige hacia la cocina.

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Igualmente, se agradece la hospitalidad recibida

Szhysszh hace una reverencia profunda

Dices en adurn: Tiene los asnos preparados para que zarpe cuando le apetezca señor

Darin, Rey de Kheleb Dum, dice: Gracias de nuevo, os haremos llegar el resultado de la reunión

Szhysszh asiente con la cabeza

Darin, Rey de Kheleb Dum abandona el cuartel seguido de dos fornidos soldado enanos.