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Ante la serie de conflictos instigados por el consejo del rey Darin, se hace saber a todos los ciudadanos de Veleiron, Kheleb Dum, seguidores de Eralie y demás gentes de provecho, la siguiente relación de hechos acaecidos recientemente, y las medidas provisionales e intenciones de la ciudad de Veleiron.
LOS HECHOS
- La ciudad de Kheleb Dum rebajó su actitud diplomática hacia Veleiron de Amistad a Paz sin motivo alguno, hará cosa de 12 años.
- El consejo de Kheleb Dum sancionó la siguiente norma el 19.17.143 de la cuarta era: – Ley ‘Nuestras_minas’:
Las minas de Kheleb Dhum fueron construidas por nuestros antepasados. Son nuestro recuerdo y nuestro legado más valioso. Los ciudadanos con
diplomacia Amistad tienen libre acceso. Paz o menor, han de abonar una quota de 100 platinos por 15 días reales de su explotación. Incumplir la
norma es un agravio a la confianza - Al conocer la norma, el consejero Hagalnae Wyn’ryel, principal proveedor de creaciones del bando bueno, decidió pedir audiencia con el consejo de Kheleb Dum. Obtuvo el silencio como respuesta.
- Hará cosa de una semana, el consejero Durgan Ethengard encontró a Hagalnae Wyn’ryel en las minas de Kheleb, pidiéndole que dejara de picar bajo amenaza de multa. Hagalnae Wyn’ryel se negó, y Durgan Ethengard lo multó con la suma de 1000 platinos y bajada de estatus.
- Fue después de estos hechos cuando obtuvo respuesta del consejo del rey Darin, en forma de misiva enviada por el consejero Rhomdur Ghirlhim, negando una reunión entre gobernantes: Saludos, Hagalnae Wyn’ryel, consejero de Veleiron.
Decidme pues, señores semielfos,, A quien, si no a los enanos, pertenecen las minas de los enanos? Quizás pertenezcan a los Semielfos, por un
casual? os rogamos, señores aliados, no insultéis nuestra inteligencia y respetéis las leyes de las ciudades que como extranjeros visitáis, y no
abuséis, de igual modo, de la confianza y la paciencia que el pueblo de Durin os demuestra.
Esperamos sinceramente que esta pequeña equivocación que el señor Hagalnae a cometido, sin duda confundido por la oscuridad de las minas y la
espesa cerveza enana, no lleve a mas. En el momento en el que nuestro aliado Hagalnae abone la multa el consejo del rey estará encantado de
recibirlo, como siempre ha hecho con todos los aliados que han querido plantearle alguna cuestión respetable… pero hasta ese momento le
recordamos al señor Hagalnae que es un infractor, y como tal no será recibido por el consejo.
También queremos recordarle al señor Hagalnae que las leyes de los enanos, solo a los enanos competen, y solo los enanos tienen derecho a discutir
o incluso a opinar sobre ellas, puesto que de los enanos son.
Reciban nuestros respetos, señores Semielfos y consejeros de Veleiron
Rhomgur Ghirlim Azzgrim, Consejero del Rey Darin de Kheleb Dum, Heredero del extinto clan Azzgrim - Tras estos hechos, Durgan Ethengard volvió a encontrar a Hagalnae Wyn’ryel picando en las minas, y lo volvió a multar con 1000 platinos y otra bajada de estatus, haciéndolo perseguido por la ciudad de Kheleb Dum.
ANTE ESTOS HECHOS, EL PUEBLO DE VELEIRON ARGUMENTA:
Que la ciudad de Kheleb Dum no tiene jurisdicción más allá de sus fronteras, fuera de las cuales se hallan las minas de la montaña.
Que no teniendo jurisdicción sobre las mismas, la idea de multar o amenazar con el uso de la fuerza a quien se hallare picando en ellas constituye una arbitrariedad jurídica.
Que esa idea de multar o amenazar con el uso de la fuerza se torna algo mucho más grave si se tiene en cuenta que se quiere imponer a supuestos aliados.
Que se ha faltado a la integridad física del Consejero de Veleiron, amenazando en estos momentos con apresarlo, y, por tanto, se ha amenazado la integridad física y representación política, por extensión, de todos los Veleironitas.
Que se ha escrito una sutil amenaza y falta de respeto hacia nuestro Edhelorn, en la forma de las siguientes palabras escritas por Durgan Ethengard en la segunda sentencia que atañe a Hagalnae Wyn’ryel: Quede escrito que el Pueblo de Kheleb siempre ha sido benévolo y paciente con los semielfos, bebiendo incluso su vino aguado y respetando su árbol sagrado, cuya madera, a buen seguro alcanzaría unos altos precios en el mercado.
Que a día de hoy, las minas de la montaña de Kheleb no son un lugar seguro para nuestros ciudadanos, enfrentándose a la amenaza de chantaje y de uso de la fuerza por parte de sus supuestos aliados y a la amenaza física de los enemigos de Eralie que campan en las minas.
Que la actitud del consejo de Kheleb Dum es más agresiva y menos neutral con Veleiron que la actitud del Consejo de Comercio de Anduar o del Señor Sombrío de Keel.
POR ESO EL PUEBLO DE VELEIRON, RESUELVE, REPRESENTADO POR SU CONSEJO, LO SIGUIENTE:
Actualizar, como medida primera, el estado diplómatico de las relaciones entre Kheleb Dum y Veleiron al que es hoy en día, que es como mínimo de neutralidad.
Sopesar, mientras tanto, el agravamiento del estado diplomático a hostilidad, iniciando un debate en el seno de nuestra ciudadanía que culminará en las próximas elecciones internas al Consejo.
Reservarse la opción de implantar medidas proporcionales en lo que respecta a las multas y amenazas de prisión.
Emplazar al consejo de Kheleb Dum a restablecer la vía de contacto diplomática, que han roto con un acto que solo se puede calificar de hostil. Emplazarlo, asímismo, a que desista en su empeño de gravar el uso de las minas. Eliminar la amenaza a nuestro consejero, y a todos los ciudadanos del bando bueno.
Emplazar al pueblo de Kheleb a que se movilice políticamente si lo que desea es no perjudicar a sus aliados.
POR ULTIMO, DECLARA
Que Veleiron, representada por su consejo, se erige en defensora de los derechos y representante de todos aquellos ciudadanos del bando bueno que quieran ser representados en esta causa justa. Hemos siempre defendido a nuestros aliados y lo seguiremos haciendo bajo los principios y doctrina de Eralie. Que todo aquel que se haya sentido ofendido o amenazado en este caso, se ponga en contacto con el órgano de gobierno de su respectiva ciudadanía y lo emplace a la acción. Que en caso de no encontrar apoyo en su ciudadanía, Veleiron defenderá a todo aquel que solicite su defensa.
Emplaza a las demás ciudades del bando bueno, en especial a nuestros hermanos Thorinyas, y a nuestros aliados militares Takomitas a recapacitar sobre su postura diplomática hacia Kheleb, y a acudir en la ayuda como soporte de nuestra ciudad en esta causa, causa para la cual nos disponemos a portar la bandera de la libertad.
Firmado y sancionado el día 20 de Slinde del 145 Era 4ª
Hagalnae Wyn’ryel, Consejero de Veleiron por la gracia del pueblo.
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