El ritual de iniciación

Te encuentras en uno de los muchos templos dedicados al dios de la Guerra Gurthang, para ser exactos en el templo de la antigua Torre Negra, Mor-Groddur, donde conviven los astutos y malvados Goblins con los fieros y enormes Gnolls.

Puedes observar como un goblin esmirriado está custodiando la entrada del templo, su mirada está fija al camino de páramos, por donde una enorme y corpulenta criatura se está acercando. Con un fuerte bastonazo del pequeño goblin, la criatura detiene su paso frente a la entrada.

Sharzug el legendario custodio dice: Tú debes ser la criatura de la que tanto hablan por la fortaleza negra verdad? El troll.

Gruzzt asiente tímidamente con la cabeza mientras que intenta cazar un mosquito con sus enormes manos

Sharzug el legendario custodio dice: Ya me informaron de tu llegada, vienes por el ritual, me equivoco?

Gruzzt balbucea: Gruzzt venir por orden caudillo, Gruzzt no saber más

Sharzug sonríe confiadamente

Sharzug el legendario custodio dice: Ya veo, todo lo que tienes de alto lo tienes de……

Sharzug el legendario custodio dice: Está bien, comenzaremos el ritual cuanto antes, no quiero perder todo el día contigo, tengo otras cosas que hacer.

Gruzzt continúa jugueteando con los mosquitos

Gruzzt grita: Gruzzt tener HAMBRE!!!

Sharzug el legendario custodio dice: Tranquilo, una vez acabado el ritual podrás comer lo que quieras en la taberna antes de emprender el viaje de vuelta.

Sharzug hace un gesto al Troll para que le siga

Sharzug el legendario custodio dice: Adelante, entremos, he de empezar los preparativos

Gruzzt sigue al renacuajo sin saber muy bien lo que sucede.

Te hallas ante un espectáculo terrorífico. Cabelleras de todas las clases cuelgan del techo mediante cuerdas toscas de color rojo. El espectáculo es dantesco. Todas las cabelleras están enganchadas con un trozo de carne arrancada de la cabeza por lo que todas gotean en una lluvia de sangre inagotable. Para colgar una cabellera solo necesitas la cabellera y una cuerda. Un montón de clavos están todavía sin tener ninguna cabellera enganchada.

Sharzug el legendario custodio dice: Muy bien, tú solo haz lo que yo te diga, de acuerdo?

Gruzzt asiente con la cabeza

Sharzug el legendario custodio dice: Que comience el ritual!

Sharzug separa las piernas y adopta una posición firme y segura. Una inspiración profunda llena los pulmones del goblin que una vez llenos empieza a expulsar el aire almacenado por la boca con ferocidad. De esta forma el brujo consigue acelerar paulatinamente el ritmo de su corazón mientras que al unísono forma un círculo con diferentes plumajes y sangre.

Sharzug libera todo el aire de su capacidad torácica y comienza una salmodia de cánticos en una lengua antigua que jamás habías escuchado antes. Acompañando al cántico, una danza extraña alrededor del círculo.

Gruzzt no presta demasiada atención a lo que acontece delante de sus morros

Sharzug rebusca en uno de sus bolsillos y saca una cuerda que acto seguido lanza al troll

Sharzug señala una cabellera en la mesa que había pasado desapercibida a tus ojos

Sharzug el legendario custodio dice: rápido, usa la cuerda con la cabellera y cuélgala!

Gruzzt mira al brujo sin saber muy bien que estaba sucediendo, pero como si un hechizo lo hubiera embrujado y le hubiera otorgado la inteligencia que le faltaba, cogió la cuerda firmemente e hizo un nudo colgando así en el techo la cabellera.

Al colgar la última cabellera del techo comienza a caer la sangre de esta cabellera. Son tantas las cabelleras colgadas recientemente que la sangre no para de caer del techo por toda la sala. Comienza una sangrienta lluvia de sangre.

La sangre no para de caer. Todo tu cuerpo está completamente empapado con la sangre que cae del techo. Te resbala por tu cara y se mete dentro de tu boca, estás saboreándola.

No sabes porqué pero estás danzando y saltando sobre la sangre. Todo a tu alrededor te da vueltas, vueltas de color rojo sangré. Tu mente se vuelve loca. Gurthang te lleva a la locura ante tanta sangre. ¡¡Acabas de entrar en un ansia de sangre!!.

Comienzas a sonreír mientras deseas beber la sangre de tu rival.

Todos los presentes en la sala bailan alocadamente cubiertos sus cuerpos de sangre por completo. Es un espectáculo macabro aunque de una belleza destructiva muy acorde a los seguidores de Gurthang.

El Troll alocado por la sed de sangre empieza a golpear todo lo que a su paso, incluyendo paredes y mobiliario.

El viejo brujo goblin queda anonadado ante semejante muestra de poder destructivo y comienza a comprender por qué el Caudillo había reclutado a semejante criatura.

Sharzug el legendario custodio dice: calma, calma, destruirás el templo!

Sharzug pronuncia un cántico y mediante un antiguo hechizo consigue calmar la sed de destrucción de la bestia

Gruzzt queda medio aturdido por el poderoso hechizo que finalmente calma al Troll

Sharzug el legendario custodio dice: Muy bien Gruzzt, el ritual ha acabado, te ordeno que vuelvas a las filas del ejército negro en Golthur-Orod, pero antes pasa por la taberna y come lo que desees para recuperar fuerzas.

Gruzzt empieza a dar saltos de alegría a la vez que grita: Gruzztttt!Gruzzt!!! Varias veces

El ritual ha finalizado y todo ha ido de la forma esperada, la sorpresa que Sharzug el brujo se ha llevado al ver a la criatura ha sido colosal. Todo empieza a cobrar sentido para él que con una sonrisa maligna pierde de vista al enorme Troll adentrándose en las profundidades de Mor-Groddur.
Posiblemente no sea la última vez que se encuentren y el futuro sea caprichoso y les depare algo más.