Inicio Foros Historias y gestas Hoy vamos a venderlo todo

Mostrando 0 respuestas a los debates
  • Autor
    Respuestas
    • garthok
      Participant
      Número de entradas: 363

      Sin saber de dónde, un gran vagón adornado con terciopelo y tirado por dos unicornios, al menos el doble del tamaño de un caballo, se detiene en la plaza central de la ciudad de Anduar. De este desciende un personaje vestido con ropas oscuras, llenas de brillantes y un gran sombrero puntiagudo.

      Se dirige al costado del vagón, que ya está estacionado, y con una gran explosión de fuegos de colores, abre el costado del carruaje. En su interior había un sinfín de pociones de todos los colores imaginables.

      Reesekh: ¡Hola, damas y caballeros! Mi nombre es Reesekh. Hoy, damas y caballeros, Anduar está de suerte.

      Reesekh: Vengo a traeros el remedio que todos estáis buscando. Adiós a esas arrugas, adiós a ser rechazados por la chica que te gusta.

      Desde lejos, se acerca danzando entre sombra y sombra una figura, que contempla el vagón desde lejos.

      Por el módico precio de 100 platinos, me enorgullezco de ofreceros esta poción de mi propia creación.

      ¿Veis mi cutis? ¿Veis mi pelo? Ni una arruga, ni una cana.

      Como hoy estoy de buen humor, el primero que levante la mano podrá disfrutar de los beneficios de mi poción sin ninguna preocupación. ¡A este invita la casa!

      Nygthiel levanta la mano, pensativa. Quizá pueda vender eso en los suburbios de la ciudad.

      Zergcthe sale de detrás de la estatua del general, y con gesto condescendiente, escupe al suelo.

      Zergcthe: ¿Chicas? No me gustan, gracias.

      Nygthiel se acerca al semi-drow, y lo mira con las cejas levantadas.

      Zergcthe hace un amago de irse.

      El hechicero mira hacia el público y se queja con sus ojos clavados en un pequeño goblin. «No se puede ser más feo», pensó para sí mismo.

      ] Nygthiel: ¿Vas a cumplir tu palabra, vendedor?

      ¡Usted! Venga aquí inmediatamente!

      Reesekh: Sí, sí, con usted hablo señorita. La del cabello largo y plateado.

      Zergcthe clava sus ojos en los de Reesekh y sonríe de forma arrogante y altiva.

      Este chasquea sus dedos y al instante se aparece detrás de Nygthiel.

      Personalmente no tengo problema con la edad, aún me quedan un par de siglos de belleza, pero si esto da frutos, conozco muchas humanas de vida efímera que se verán encandiladas con la noticia.

      Y a los hijos de Khaol se nos da muy bien negociar.

      Sabía que diría eso. Pero recuerde… esto no es un show, es un negocio serio.

      Zergcthe observa con gesto suspicaz a Nygthiel.

      Eso sirve para encontrar a chicos también. La voz de una pequeña halfling se hizo notar entre los expectantes.

      Zergcthe: No te hacía creedor en tales fruslerías, semi-drow.

      Una musiquita comienza a sonar desde el interior del vagón y sin saber por qué, tres miembros del público suben el peldaño al pequeño escenario.

      El mago comienza a cantar.

      Si no quieres rejuvenecer, por dinero no perder… Déjame mostrar que mi poción su milagro puede obrar.

      Si lo que buscas es ser tú mismo, dale un sorbo a mi poción, deja libre tu pasión.

      Reesekh acerca un vaso lleno hacia Zergcthe y al instante sus labios comienzan a engordar y sus pechos a sobresalir de la rasgada blusa.

      Las tres hembras de diferentes razas se miran a los ojos y comienzan a pelear intentando beberse el resto del líquido.

      Zergcthe se acaricia los labios y los pechos, maravillada con su recién adquirida exuberante belleza.

      Mientras tanto, el astuto mago aprovecha para recolectar los objetos de valor con su sirviente invisible de entre los asistentes del público.

      Cuando el mago se dispone a robar a la hija de Khaol, la figura de la mujer desaparece en un remolino de oscuridad, junto con todas sus pertenencias. Detrás de la estatua del General de Anduar, sonriendo con diversión, se encuentra Nygthiel, tranquila después de ver cómo su sombra proyectada desaparecía.

      Una maligna carcajada resuena en el ambiente y con una explosión de fuegos artificiales similar a la anterior, el vagón desaparece de la plaza.

Mostrando 0 respuestas a los debates
  • Debes estar registrado para responder a este debate.