La anilla perdida y la anciana loba

El cielo estaba plomizo sobre la ruidosa Anduar, cuando una joven encapuchada algo nerviosa, según delataban sus movimientos, cruzó la plaza en busca de la guardia de la ciudad [Dauzzy]

La joven interroga a todo el que se encuentra a su paso por la forma de encontrar a la guardia, pero las gentes ocupadas con sus quehaceres, no le prestan demasiada atención [Dauzzy]

La nerviosa chica se giro al cruzar la plaza y se choco con un gran Hombre-lagarto. [Thysseth]

Dauzzy: Di, di, disculpe señor, no miraba por donde iba… Podría decirme donde puedo encontrar un guardia?

Thysseth: ¿Un guardia?, ¿Te refieres a la Guardia nivrim?

Dauzzy: Nivrim? Así se llama la guardia? Bien, pues si, un NivrimThysseth: Estas ante uno, ¿que desea?, ¿que te ocurre?Dauzzy Se pone de pronto muy nerviosa y no sabe como esconder las manos ensangrentadas que finalmente oculta tras su espalda

Thysseth el hombre lagarto agarra de un brazo a la chica, a la vez que le pregunta, ¿que estas ocultandome tras tu espalda?

Dauzzy intenta zafarse de la fuerte presa del Nivrim, mientras apenas atina a decir: yo no fui, yo no fui… Estaba allí y me atacó … pero yo no fui

Una anciana se acerca al guardia, y arquea las cejas como queriendo decir algo, pero no se atreve, el miedo es visible en su cara.
[Yrdriel]

El guardia mira a su alrededor, percatandose de que no se trate de una emboscada. [Thysseth]

Dauzzy se rinde tras un buen rato forcejeando al ver que no conseguirá soltarse y respirando profundamente se envalentona mirando a los ojos del hombre-lagarto

Dauzzy traga saliva y balbucea: no sé cómo ha pasado, pero está muerto. [Yrdriel]

El guardia entra en cólera, se gira hacia la chica y aproximandose a su cara le grita: Que has hecho que?? a quien? y donde!! [Thysseth]

La cara de la pobre muchacha queda regada de babas de lagarto [Dauzzy]

La anciana se dirige al guardia a la vez que dice ‘Yo lo he visto todo, fue ella…’. [Yrdriel]

Thysseth: A ver, por partes. ¿Os conoceis?Dauzzy Mira atentamente a la anciana que le señala con un dedo arrugado y lleno de manchas por la edad y dice: Si! Esa anciana estaba allí! El hombre estaba vivo, me atacó.De pronto se quedó todo más brillante que la luz del día y puff! Ambos estabamos bañados en sangre y esa anciana estaba riendo en el callejón

La anciana, con un tono algo más agresivo y pasándose el dedo índice por las encías desiertas, exclama: ¡Mentira, yo no me estaba riendo de nada y no fue eso lo que pasó, él no había hecho nada!. [Yrdriel]

Thysseth mira profundamente a los ojos de la anciana… Y casi susurrandole: ¿que me estas ocultando… anciana?

A los pies de la anciana comienza a formarse un charquito oscuro y humeante. [Dauzzy]

La anciana, notando cómo algo caliente se desliza por su piernas, se acerca al oído del guardia y le susurra unas palabras en una lengua que no llega a comprender. [Yrdriel]

Thysseth sacude su cabeza hacia los lados, mira de nuevo a la anciana… ¿Que tratas de hacer?

Dauzzy aprovechando que el guardia está distraido por la anciana y ha aflojado algo su presa, se suelta de un tirón y echa a correr calle abajo.

La anciana se encorva, sus huesos crujen, sus extremidades aumentan de tamaño y una maraña de pelo oscuro comienza a envolverla. [Yrdriel]

El guardia, empuña con destreza su espada y escudo, y se pone en posicion de combate. Mientras ve como la nerviosa chica se para de repente y da media vuelta dirigiendose de nuevo junto al guardia. [Thysseth]

La gente que presencia la transformación de la anciana, huyen despavoridos por todas partes, abandonando enseres y mercancías por todas partes. [Dauzzy]

La anciana, convertida en una extraña bestia, observa la cola del guardia y, de un fugaz zarpazo, secciona la mitad de ésta. [Yrdriel]

El lagarto envuelto en ira salta sobre la bestia, y de un fugaz golpe corta en dos el cuerpo de esta. [Thysseth]

Dauzzy recibe un fuerte golpe en la cara con el muñón ensangrentado de la cola y trastavillando pisa la otra parte en el suelo
cayendo sin remedio en un charco de sangre

La muchedumbre trata de asimilar el sangriento espectáculo del que acaban de ser presentes, mientras un avispado niño coge la parte seccionada de cola y se escabulle entre la multitud. [Yrdriel]

El guardia se recompone como puede. Mira hacia donde se situaba su extremidad. NOOOOOOOO! ¿donde esta mi cola? En ella iba la anilla a la que tanto aprecio tengo!! [Thysseth]

Dauzzy: Pues siento deciros señor guardia, que un muchacho de unos 10 años con ropas andrajosas se la llevó justo por ahí.

El guardia sin cola, preocupado por la pérdida de la anilla dice: ‘Tenemos que alcanzarlo, no puede llevarse mi anilla, ayúdame’. [Yrdriel]