Stalmarr (ayuda Registro 2)

Buenos días a todos. Aún es pronto, pues no estoy obligado a realizar mi registro 2 aún, pero he pensado en empezar a diseñarlo.

A veces encuentro otros registros2 muy extensos, y como yo sospecho que mi calidad narrativa no es muy buena, he pensado en realizar un registro2 lo más minimalista posible. Pero me gustaría conocer un poco vuestra opinión, y saber si cortaríais por donde sugiero yo, o publicaríais el registro 2 con el texto completo.

Gracias.

Historia de Stalmarr el Huèrfano

8 de Ledan del año 83, 4a Época. Él bosque de Eloras permanece aún bajo la resaca de las altas temperaturas veraniegas y del incesante ruido de las chicharras. Pese a ello, y gracias a las lluvias de los últimos días Blendo y Blenda Rocaseca pasean tranquilamente por el bosque en busca de alguna baya o seta silvestre.
De pronto, tras los matorrales se escucha un leve ruido. Algo fuera de lo común. Blendo y Blenda se esconden ante un posible peligro, y desde su escondite decid​en acechar la zona de dónde proviene él extraño ruido

-Parece una risa.- Afirma Blendo.
Blenda asiente con la cabeza mientras sigila en dirección a los matorrales. Al apartarlos, descubren un pequeño cesto tapado por una capucha de la oscuridad muy deteriorada.

Al escuchar la inocente risa de su interior, Blenda alarga su brazo para retirar la prenda y descubrir su interior. Blendo se lo impide.

-Puede ser peligroso- dice Blendo con gesto serio  -podría ser una trampa.

Blenda vuelve a insistir, y con decisión retira la prenda y descubre dentro al hermoso halfling

-Esto es una bendición de Eralie– dice Blenda entre lágrimas.
-Bobadas. Ese infeliz es sin duda el hijo de algún maldito renegado.
La mirada c​ómplice de la pareja concluye con una sonrisa de felicidad. Blenda coge el cesto con la pequeña criatura y cogida de la mano de su compañero Blendo, se dan la vuelta hacia el poblado de Eloras.

****

Stalmarr vivió su infancia ​bajo la ​sobreprotec​ción​ ​de Blendo y Blenda quienes mantuvieron al joven halfling ajeno a los innumerables peligros que acechaban el reino de Anduar.

De vez en cuando Stalmarr escuchaba la campana de la Torre de Eloras, y junto a otros niños jugaban a ocultarse en sus escondrijos habituales. Mientras tanto, observaban como el resto de ciudadanos corrían armados hacia las puertas del poblado.

———————- (parte opcional)———————————

Un día, preso del aburrimiento, Stalmarr quiso explorar mas allá de su amado pueblo, y fue entonces cuando se dió cuenta de que su mundo, es mucho más grande de lo que él creyó siempre.

En ese momento, ansioso de descubrir mundo, decidió abandonar su hogar, y a partir de entonces fue cuando empezó a vivir innumerables desventuras. Hasta que por fin, conoció a una vieja gnoma, la cual lo arropó bajo su protección y le enseñó a sobrevivir.