Después de las grandes guerras que provocaron el Gran Cataclismo, los pocos goblins que habían sobrevivido a el, se reunieron procedentes de todas las tribus que vivían al norte, este y sur de Golthur-Orod. La antigua fortaleza orca había quedado prácticamente destruida, tribus orcas rondaban aniquilando todo lo que se encontraban y los goblins hicieron un movimiento desesperado cruzando la arrasada dendara y llegando a la semi-destruida torre de Ezebhra.
De los pocos goblins que se reunieron destacaba Raigy, hijo del que fuera el shaman más grande de todos los tiempos y avatar que lucho contra los Demonios que asolaron el mundo.
Debido principalmente a que los goblins confían sus estudios y rezos a los demonios y que veneran a sus ancestros no les costo demasiado sobreponerse a la falta de los Dioses mayores y menores del mundo y en consecuencia se pusieron a trabajar para construir la fortaleza que les iba a dar cobijo, Mor-Groddur.
Raigy conoce a Riccah gracias a un viejo shaman instructor de ambos, el cual les enseña en secreto las artes de los ancestros y su forma de venerarlos, desde entonces han mantenido una unión especial. Esa misma unión y la fuerza en la creencia de sus ancestros les permite ser más fuertes cada día esperando el momento propicio para reunir a las tribus goblins y formar un gran ejercito temido en los reinos y poder por fin adorar realmente a los poderes Ancestrales y no a dioses imaginarios y corruptos.
Siempre recuerdan que fueron otros dioses y su desidia los que les quitaron a sus padres y familias.

Aqui y ahora empieza La Familia J’Zhadra