Como se explicó en su día, Kattak y Kheleb tienen un nexo de unión muy fuerte. Tal es ese nexo, que se pueden considerar las dos ciudadanías aliadas más fieles de los reinos.
Kheleb, en el pasado, salvó a Kattak de pasar a ser una región más del mal, y reconstruyó la ciudad. Desde entonces, Kattak y sus ciudadanos son unos firmes aliados de los enanos y es algo innegociable, y una de las pocas diplomacias que no están en las manos de los jugadores.

Ante la actual situación, y aunque hubiéramos preferido que la decisión la tomara el actual gobernador de Kattak, se ha modificado la diplomacia de Kattak hacia Takome a NEUTRALIDAD de forma unilateral.
Los Kathenses no pueden permanecer impertérritos ante lo que está sucediendo, y si toman partido deben tomarlo siempre del lado de Kheleb. Pero también se entiende que Kattak es un gran bazar, y que no le interesa perder el comercio con Takome, por lo que no se forzará a dicha ciudad a entrar en la guerra, pero tampoco se le permite mantenerse en PAZ.

No tiene sentido la actitud de algunos Kathenses que cuestionan a los enanos y rompen sus reglas. Ante ese tipo de situación, pediremos al gobernador de Kattak que actúe cuando el gobierno de Kheleb pida explicaciones ante ciertos hechos.
Obviamente éste es libre de usar su carisma y diplomacia para rebajar la tensión, pero repito, no se permite que Kattak rompa su alianza militar con los enanos. Si así fuera, Kattak perdería la alianza, perderiera su ejército y guardias, subvencionados por Darin y quedaría como un pueblucho más como lo fue en su día.
Eso se tiene que tener muy claro porque os envalentonáis contra los enanos olvidando el pasado de Kattak, y repito, esa historia viene de muchos años atrás y no se permite cambiarla.
Los Kathenses deben jugar de acuerdo con ésto, y no les queda más que tener mucha mano izquierda en este asunto, para mantenerse neutrales.

Por último, recordamos que el reino es Kheleb, no Kattak; ésto es, Kattak es una ciudad del reino, no tiene potestad más allá de sus murallas.