Tras una gigantesca borrachera los orcos torturadores de Golthur Orod han descubierto que no
les salen las cuentas y que les faltan prisioneros, así que han llamado a un orgo
quien tras hacer los cálculos de densidad poblacional de las prisiones en función
de las heces depositadas y su tiempo de maduracion según el gusto, ha
determinado que realmente faltan prisioneros y se ha iniciado inmediatamente su
captura. Los últimos rastros indican que fueron hacia el norte de la fortaleza,
por lo que se anima a todos a perseguirlos y darles muerte por su desfachatez.
No está de más subrayar que aquellos que les den muerte serán bien vistos en la fortaleza.