Después de tantos años, los demonios de Naggrung han acabado desvinculándose de su cometido original por el que fueron traídos a la isla, por ello la mayoría son independientes y han acabado eligiendo a sus propios señores a los que sirven.

Por ello, los demonios Grakknak y Karzumsak que habitan en la cueva de Macnak no son ciudadanos de Agnur y sirven al general del Abismo y a sus propios intereses, considerándose así demonios vagabundos sin ciudadanía.

Los demonios Grakknak y Karzumsak que habitan en las cercanías de Agnur, serán considerados ciudadanos de Agnur pues obedecen las órdenes del Señor de la torre de Nigromancia, el cual los domina.