**************HISTORIA Y AMBIENTACIÓN DE ELDOR EN FASCÍCULOS*************
ELDOR. FASCÍCULO I: EL PROGRESO Y LA EVOLUCIÓN.
NOTA: Tenga en cuenta el lector, antes de comenzar su lectura, que los datos y rasgos
que aquí se describen sobre los elizhim (eldorian) aún dista de la civilización eldorian
actual, por lo que el lector deberá leer entre líneas con algo de perspectiva histórica.
Segunda Era de Eirea. El desarrollo de una civilización.
A pesar del íncreible crecimiento de la población y de la comunidad, los estrechos lazos
de familiaridad entre los elizhim no hacían sino incrementar, debido a las intensas enseñanzas
de un grupo de elegidos por el guía de la comunidad, con el fin de inculcar en los más jóvenes
el respeto a los demás miembros de la misma, y a adorar a su dios Hiros.
1.- Religión.
Los elizhim, a diferencia de los aldezhim, creen en Hiros, creen en una deidad única que no
interviene en asuntos de mortales. Los aldhezim piensan que Hiros, creó al ser humano con fallos,
como prueba de superación en su desarrollo y en su vida. Al no depender de los ruegos a ninguna
deidad, los elizhim sacrificaban su cuerpo y su alma, los entrenaban a diario, ya que creían que
solo cuando se produce un equilibrio entre el cuerpo y el espíritu ganamos el alma, momento en
el cual el ser humano se convierte en perfecto, y así cumplir la misión encomendada por Hiros en
la creación.
No existen imágenes de Hiros previas a los hechos que ocurrieron durante el Cataclismo, pero sí se
conoce que los elizhim, o eldorian, adoraban a un Dios con rasgos humanos.
El guía elegía año tras año a los jóvenes y niños que más destacaban tanto física como mentalmente,
con el fin de entrenarlo y adiestrarlo para ser un buen monje, que, además, debía ayudar a su
comunidad de forma muy estrecha, enseñando oficios, religión, interpelando entre los escasos conflictos
que existían entre los miembros de la comunidad…etc. Y por ello eran respetados y muy valorados
por la sociedad.
2.- Clasificación social.
Una civilización tan importante se encontraba dividida en diferentes clases sociales, pero no con
ánimo de poder o de derechos. Los eldorian se consideran iguales entre sí, y comprenden que cada
individuo debe realizar una función en la comunidad, no sólo para que esta sobreviva, sino para que
prospere, algo que hacía a pasos agigantados.
La cabeza visible era el Guía, desigando por sucesión familiar. Normalmente comenzaban su ‘mandato’
a avanzada edad, cuando su padre fallecía, y básicamente se encargaba de la organización de los
oficios, y de los juicios que pudieran hacer falta para eliminar posibles discrepancias. El guía
era elegido entre los hijos que hubieran sido adiestrados en el arte del khaldar (monjes).
También existía un lider militar, que se encargaba del adiestramiento de la defensa de La Guarida
y del resto de construcciones que se realizaron posteriormente. Era el senescal. Era elegido por
el guía en función de sus características en combate y por sus hazañas en guerra con otras tribus
o por sus cazas.
El resto de la población se encargaba de la defensa y de los oficios enseñados por los monjes.
A pesar de la unión de las tribus aldezhim y elizhim, las diferencias raciales entre ambas tribus
era notable. Desde su fisonomía (elizhim rubios con ojos claros, aldezhim muy morenos con ojos oscuros),
su religión (elizhim monoteístas, aldezhim politeístas) y un largo etc. Poco a poco, las razas se
fueron mezclando dando lugar a eldorian con pelo claro y ojos oscuros y viceversa, que eran contemplados
con orgullo ya que simbolizaban la fructífera unión entre ambas tribus. Excepto por una minoría
aldezhim, que esperaba su momento con paciencia, sembrando la semilla del odio y del rencor de padres
a hijos, generación tras generación, llegando a formar una sociedad secreta, Los Herederos de Grab.
Los Herederos de Grab, conservaban en secreto sus creencias, sobretodo religiosas, donde dioses
sanguinarios guiaban el destino de los hombres, donde solo los más fuertes debían vivir, donde
los poderosos debían hundir a los débiles por ofender a los dioses.
3.- Economía.
Pronto, las enseñanzas de los monjes välar, dió sus frutos, y diferentes oficios fueron explotados.
Grandes galerías se contruyeron gracias a los mineros y se encontraron multitud de metales para
poder forjar objetos. Se realizaron multitud de construcciones en el exterior de la Guarida, totalmente
habitables por sus inmejorables técnicas constructivas y por el buen empleo de los minerales.
Los eldorian que eran entrenados en el uso de los arcos se dedicaban a cazar, aunque debían recorrer
grandes distancias a lomos de los aranäe, los caballos nativos de la zona, de abundante pelo, de
los que sobrevivían los eldorian, ya que para obtener comida debían recorrer grandes distancias
en la nieve.
Todos los bienes obtenidos eran propiedad de la comunidad, y eran repartidos por el guía, aunque,
cuando había excedentes, las familias podían intercambiar sus productos por otros de otra familia
naciendo así una viva transacción de materiales gracias al trueque.
Poco a poco, en los veranos, patrullas de leñadores viajaban al sur a lomos de los aranäe para
obtener madera, que gracias al excedente les permitió crear incluso una pequeña flota pesquera.
4.- Ejército y clases.
Los ciudadanos más diestros eran entrenados como arqueros. Gracias a la agilidad entrenada, eran
capaces de lanzar flechas de forma precisa a lomos de sus monturas (arqueros aranäe). Eran el
contacto con el exterior de la Guarida, debido a que debían de viajar muchas millas en sus periodos
de caza de animales. Por ello debían entrenarse en habilidades de espionaje y subterfugio, con el
fin de poder conocer mejor las poblaciones que habitaban un poco más al sur de Dalaensar. Los
arqueros aranäe, eran los ojos de los eldorian, y en muchas ocasiones también sus manos.
Los ciudadanos más fuertes eran entrenados en el arte de la lucha cuerpo a cuerpo, y se encargaban
fundamentalmente de la defensa de los alrededores de la guarida, y de alguna que otra campaña
ofensiva cuando los arqueros notificaban que algún peligro se aproximaba a sus dominios.
5.- Algo está fallando.
Se conocía, por parte de los líderes de la comunidad, de la existencia de una asociación de
aldezhim. Lo que no conocían era sus intenciones. Pensaban que tan sólo querían hacer sobrevivir sus
antiguas creencias, algo que el Guía, para sí mismo aprobaba y permitía.
Se reunían eventualmente en el exterior, en verano, cerca de la costa, y celebraban antiguos ritos
y alabanzas a sus antiguos dioses, y sacrificaban animales que eran desangrados, bajos los atentos
y escondidos arqueros aranäe, que siempre vigilaban dichas reuniones clandestinas. Hablaban en su
antiguo dialecto y notificaban al Guía y al Senescal de sus extrañas intenciones. Nombraban y
honraban a Grab. Un nombre que estaba vetado. Pero no hicieron caso. Fue entonces cuando sucedió todo.
6.- El Cataclismo.
Estaba amaneciendo cuando extrañas rocas ardiendo comenzaron a llover desde los cielos, impactando
brutalmente contra la nieve. Una tras otra fueron derribando algunas construcciones exteriores. Poco
a poco, la alarma hizo que algunos habitantes de la Guarida salieran al exterior para contemplar
aterrorizados que el Mar se había convertido en fuego, que centenares de estrellas ardientes caían
a sus pies destrozándolo todo a su paso. Pocos más sobrevivieron.
Una enorme bola de fuego impactó violentamente contra la ladera, derrumbándola y enterrando a la
mayoría de la población, que aún se encontraba en el interior, y que jamás volverían a salir.
Incluyendo al senescal, incluyendo al Guía de Eldor y toda su estirpe.
Era el día 1 de Osucaru. El día del fin de la Segunda Era para los Eldorian.
PRÖXIMO FASCICULO: Hiros revelado a los eldorian. El viaje. La tración. El asentamiento.
FASCICULO IV: Eldorham, el nuevo hogar. Las Campañas del Norte. Un Templo para Hiros. La Torre del
Homenaje.
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