Hace varios minutos, las estancias de los Ancestros en el Panteón de los
Dioses fueron atacadas por un espectro suicida que se inmoló en presencia
de los Seis Ancestros.
No ha sido un caso aislado. Se trata de Gurthang, que desde el plano en
el que está prisionero, está mandando criaturas -de escaso poder, pues no
ha recuperado toda su fuerza, ni la recuperará sin ayuda- para boicotear a
los Ancestros, a los que antaño dominaba, y que tras el cambio de Era le
hicieron prisionero en un subplano del Averno.

La guerra, para los Ancestros, ha comenzado. Puede que a veces no respondan
a vuestra llamada, pues están consierablemente… atareados. Tened paciencia
con ellos -los que queráis seguir de su lado, claro está-.

Dunkelheit