Lejos de ser una ceremonia aclamada y que reuniese a todos los ciudadanos en un ostentoso desfile por las calles de Takome, la coronación de la sucesora de Elder I se convirtió en una ceremonia silenciosa y casi sellada en el anonimato.

Tras mucho tiempo de deliberacion y discusión, las familias nobles decidieron el nombre de la nueva Reina de Takome en un acuerdo que le cedería el poder que antaño ostentaba su amado rey.
Ahora, la nueva reina ha tomado un amargo reinado en una ciudadaía que observa con un cierto recelo sus acciones, pues temen que haya sido una mala candidata, principalmente por su juventud.

La nueva reina, como muestra de buena voluntad y de empatia con el dolor que el pueblo sufre por la muerte de Elder, ha eliminado la privacidad de su alcazar para permitir a cualquiera que desee una audiencia poder entrar sin ningun recelo.

El mercado de Takome, quizas el unico que ha sufrido un cierto alboroto el dia de la coronacion por culpa del ir y venir de mercaderes mostrando sus mejores telas para la reina (en un intento de llevarse un buen pellizco, claro esta), ha dejado un monton de artículos que fueron usados por los artesanos reales para vestir a la nueva monarca.

El futuro de Takome esta ahora en manos de una nueva -y joven- reina.