La crisis ha llegado a Eloras, donde por falta de capital han decidido despedir al espléndido ladrón de la entrada de su poblado, el cual se jubila sin que nunca le hayan pillado robando a los enemigos.
Para paliar su ausencia, han contratado a un halfling que les sale más barato, pero también es algo más torpe, dándole de este modo una oportunidad a los atacantes de no perder un objeto.
Atentamente, Zoilder.